familia monoparental, diversidad familiar y adopción

Freaks

Hace algún tiempo, M., una amiga que tiene (en pareja) 2 hijas, me comentó que «salir con otras madres monoparentales es muy freak, no? No ser monoparental, esto me parece bien. Pero juntarse con otras familias monoparentales…»

 

Me he acordado de ella este fin de semana, porque 8 madres (casi) monoparentales (dos de ellas son separadas, con ex que ejercen de padre en mayor o menor medida) nos hemos ido con nuestros 9 churumbeles a pasar dos días en la montaña.

Ha sido un fin de semana muy chulo. Hemos visto cómo nace un río, hemos descubierto que los árboles, además de verdes, pueden ser marrones, amarillos, rojos, naranjas, morados, granates y lilas, hemos respirado el aire frío y limpio de la montaña… Los mayores reclamaron (y consiguieron) su cuota de autonomía y se largaban a la que podían a la plaza a jugar a pelota o a investigar el pueblo; los pequeños han empezado a cogerle el tranquillo a relacionarse los unos con los otros; y las madres hemos compartido tiempo, responsabilidades y trabajo doméstico, hemos vigilado críos a cuatro manos y hemos echado unas risas cuando por fin cayeron rendidas todas las criaturas.

 Estas 8 familias (y otro puñado que no estuvo en esta excursión) no pertenecemos a ninguna asociación o agrupación, somos simplemente familias que hemos ido coincidiendo en distintos momentos y que, además de la monoparentalidad y la adopción, hemos descubierto que compartimos otras muchas cosas.

Nunca me ha parecido que ninguna de nosotros sea más «freak» que las muchas personas en pareja que conozco. Que la misma M….

Y a pesar de algunos comentarios que hemos oído («Son niños que están de colonias»… «Deben pertenecer a una comunidad»… «¿Dónde habéis dejado a los maridos?»),  tampoco me ha parecido nada freak este fin de semana.

¿Os imagináis que yo le dijera a M. cuando sale con otras parejas con hijos que «juntarse con parejas es freak»?

Comentarios en: "Freaks" (21)

  1. Si te juntas porque te juntas, si vas sola ..si es que con tus hijos puede llamarse ir sola…porque vas sola…
    la cosa es que al final alguien se permite el lujo de opinar donde nunca lo harían con una pareja…
    A veces no me apetece cocinar y bajamos al «chino» del barrio. Si me encuentro a alguien invariablemente pregunta: ¿Y VAS SOLA? Pues no, no pasaría nada, pero no. Voy con mis hijos.

    • Esto me recuerda cuando era adolescente y salía con mis amigas, siempre había algún tipo que se te acercaba y te preguntaba: ¿Estás sola? No, coño, ¡estoy con mis amigas!! Parece que ir sin hombre es equivalente a estar sola…

      En cuánto a hacer cosas sola (sin nadie), la verdad es que a mí me costó un rato… recuerdo la primera vez que fui al cine sola, el mal rollo que tenía encima pensando en qué pensarían de mí (luego me dí cuenta que lo que imaginaba que otros pensaban de mí… no tenía nada que ver con lo que yo pensaba de otros que iban al cine solos), recuerdo la primera vez que viajé sola y la primera vez que me fui sola a tomar algo a un bar… en este sentido, tener hijos me ha hecho perder muchas manías, no sabría deciros por qué.

  2. Obviamente, no conozco a M., y por tanto no tengo ni idea de qué intención hay tras ese comentario; pero, dando por hecho que, como amiga, no pretende molestar, yo creo que el comentario es comprensible. Mucho más comprensible que si alguien te dice que eres freak por ir con otras parejas.

    ¿Por qué?

    Para empezar, por estadística: una cosa, con las estadísticas en la mano, es normal, y la otra todavía no. Si vas al trabajo en patinete te van a hacer comentarios que no te harán si vas en coche. Y no tendría sentido responder «¡Si viniese en coche no me dirías nada…!». No, claro, nadie te diría nada.

    El error, en este caso, se comete cuando tanto del dato de la monoparentalidad como del del patinete alguien extrae conclusiones que nada tienen que ver con el asunto en concreto. Que juzgue, o mejor dicho prejuzgue.

    Por otro lado, supongo que decir cosas así surge de que esa persona no sabe si un grupo de ese tipo está intentando subrayar de algún modo esa diferencia compartida, y convertirla en una especie de bandera identificativa. Que quizá piensa que no es el resultado de una afinidad natural y espontánea, sino un intento de qué sé yo. Yo he dicho algo parecido sobre el hecho de que se juntasen padres de niños etíopes; me parecía un poco forzado (raro=freak), y hasta un pelín sectario. Luego, al ver qué hacían y cuál era su actitud, y sobre todo al ver que había verdadera amistad, lo he llegado a ver como algo, no completamente normal, porque «normal» no es (estadísticas, de nuevo; solo hay que ver las caras de la gente cuando entramos en un restaurante), pero sí lógico y muy positivo.

    En resumen: yo creo que sería inaceptable que algo como tu fin de semana diese pie a juicios de valor sobre vosotras (juicios en serio e intencionados, quiero decir); pero que tampoco hay que estar con la escopeta cargada, pretendiendo que nada le choque a nadie y cada comentario sea el resultado de un enorme ejercicio de comprensión y de toda la reflexión del mundo sobre nuestros temas : )

    Hala, ya tenéis el punto de vista de enfrente ; )

    Besos.

    • A mí no me extraña que a los desconocidos les parezca raro. No me extrañaron los comentarios que oímos en el pueblo (no sólo éramos sólo madres: ¡¡es que no había dos niños del mismo color!!). Pero sí me extrañó de M. Porque creo que detrás de su comentario (¿crítica?) estaba un cierto prejuicio sobre lo que es ser monoparental. Un prejuicio muy extendido en la sociedad, que va de la conmiseración (pobre, ¡¡no consigue encontrar novio!!) a la desconfianza (¿por qué no quiere tener novio?), en vez de asumir que en la mayor parte de los casos es algo circunstancial.

      Comparto la diferencia que apuntas. Para mí lo que sería raro es pensar «voy a buscar familias monoparentales para hacer cosas juntas porque sólo con ellas conseguiré entenderme»; como lo es, por otra parte, que algunas parejas, cuando empiezan a salir, busquen «otras parejas» para salir, en vez de hacerlo con la gente que conocen, sin plantearse si son o no parejas…

      Otra cosa es que la vida te vaya llevando a compartir más cosas – desde el punto de vista de la logística – con gente «afín» en cierto sentido, con gente que tiene niños de la misma edad, por ejemplo, o la que le gusta hacer el mismo tipo de cosas…

      • Ay, he escrito más abajo antes de leer esto.

        Estoy totalmente de acuerdo contigo.

        Al margen ya de este ejemplo concreto, me parece que cualquier grupo (más cuanto más «diferente» sea) tiene, a la vez que informa y busca y pide/exige comprensión y respeto, hacer de vez en cuando el ejercicio (paradójico, sin duda) de «comprender a la mayoría». Es decir, de ser capaz de salir de su especificidad, de su ambiente, de su gran tema omnipresente y darse cuenta de cómo se les ve desde fuera, cuánto importan sus preocupaciones a los demás, etc.; de salir de su círculo y «relativizarse» un poco. Creo que es algo muy útil y muy sano.

        Y que lo es, insisto, para cualquiera. Se trate de círculos profesionales, familiares, personales, deportivos, políticos, de compromiso social, etc.

        Besos.

      • Pues yo también estoy totalmente de acuerdo contigo.

        Y, ¿sabes?, pienso que quizás lo que más me molestó del comentario fue la palabra «freak».

        Y confieso que quizás lo que me ha decidido a escribir esta entrada (el comentario fue hecho hace tiempo) fue la posibilidad de poner esta foto tan bonita de nuestros niños…

      • Muy bonita, sí : )

      • Una foto preciosa, sin duda.
        Al final, hay que valorar lo que tenemos, nuestros amigos, nuestro entorno, mimarlo y pasar de lo demás. Al final llegas a una edad en la que no hay ni tiempo ni ganas de andar con tonterías.

  3. Yo no entiendo nada… desde que he empezado a leer no he entendido por qué es freak compartir con una familia (o 5) monoparental… debo der corta pero no veo nada extraño… ni tampoco veo nada raro en ir «sola», con los hijos…

  4. Yo también ando un poco perdida… no entiendo que puede tener de raro que varias familias se junten para salir el fin de semana… o que una madre cene con sus hijos fuera de casa………… de verdad que a mi esta sociedad me empieza a quedar grande!!!!!

  5. No sé, supongo que sin llegar a ser freak te choca un grupo de tanta mujer y niño sin ningún hombre como me llamaría la atención al revés. Nuestro grupo es mixto, parejas, solteras, divorciadas (todavía ningún -o solo) y supongo que yendo con la prole llamamos la atención tb. por cualquier motivo, mucho niño, mucho revuelo… más mujeres que hombres… A cada uno le llama más la atención una cosa que otra dependiendo de su entorno.
    La generación de nuestros hijos será más multirracial que la nuestra, más abierta que la nuestra, les sorprenderan otras cosas, como por ejemplo, que una pareja dure toda la vida, cosa que ya llama la atención en nuestra generación.
    Estoy con Portorosa en su resumen final.

    • Sí, tienes razón, llama mucho la atención… yo tengo algunas «parejas de larga duración» en mi entorno y provocan admiración – y envidia.

      Yo personalmente no tengo un «grupo». Hago cosas con amigos distintos, en esta ocasión (y en otras) hemos coincidido un puñado de (casi) monoparentales (que tenemos otras cosas en común: niños de los mismos lugares en algunos casos, por ejemplo, profesiones parecidas, etc), pero también hago muchas cosas con parejas amigas, con o sin hijos, y (menos, porque difícilmente me libro de los niños), con amigos solteros sin hijos…

  6. Por el simple hecho de quedar con otras familias adoptivas, hay gente que dice que estamos creando un «gueto».

    No hay que hacer caso. Porque «normal» realmente no existe. Y siempre habrá gente que no puede aceptar que otros hagan su vida como vean conveniente… siempre habrán los que piensan que todos tenemos que seguir las mismas pautas, el mismo camino…

    🙂

    • siempre habrá gente que no puede aceptar…

      Es verdad. La hay.

      Pero a mí me parece un error creer que tras ciertos comentarios, la mayoría de las veces hechos simplemente sin pensar, hay un verdadero rechazo. Creo que es verdad que en ocasiones pueden ser sintomáticos, como decía, de prejuicios; pero también que en otras es exagerado extraer ciertas conclusiones y ver ciertas intenciones. A eso me refería con lo de estar con la escopeta cargada.

  7. No se si será freak o no (A estas alturas de la vida a quién le importa ser freak … tengo ya tantos adjetivos encima que uno más o menos… ) Lo que si sé, es que me da verdadero gusto (y también envidia, lo reconozco) el ver la red tan amplia que tienes de amigos-conocidos-colegas… con los que tus hijos y tu pudeis disfrutar, compartir expereicnias, vida…. Mi enhorabuena.

    • Gracias… ya sabes qué decían los Rolling Stones: no siempre puedes conseguir lo que quieres, pero al final, casi siempre consigues lo que realmente necesitas.
      Creo que es así en mi caso.

  8. Es más importante querer lo que se tiene que tener lo que se quiere.

    🙂

  9. A mi también me han dicho alguna vez que lo de juntarse familias adoptivas crea guetos, cuando en realidad te juntas unas pocas veces al año y para nuestros hijos es bueno saber que hay muchas más familias como la suya. En el caso monoparental también,para mi hijo saber que H. o T. sólo tienen mamá como él, le hace sentir que no es el único y el raro, que hay más gente como él y eso nos gusta a todos, encontrar similitudes con otras personas.

    • Bueno, en nuestro caso lo de «juntarse» no es tan necesario, porque vivimos en una ciudad y un barrio donde hay montones de ambas cosas. Sólo en el parque coincidimos con 10 o 12 niños llegados de Etiopía… La verdad es que es fantástico que ni en el cole, ni en las extraescolares, ni en el parque, sean el único negro/marroquí, adoptado o niño sin padre.

      • El mio sí, y eso ultimamente le entristece, quiere ser como los demás, así que estamos en plena fase de resaltar las maravillas de la diferencia y recordando que el mundo es mucho más grande que el entorno del parque y el cole. En 15 días lo voy a llevar a Madrid a ver El Rey León, además de su reparto multicultural, cuando vamos a la capital me doy cuenta de que verse rodeado de gente de todos los colores le hace más consciente de que el mundo es más amplio que su entorno (y eso que solo tiene 5 añitos)

      • Alguna vez he tenido la fantasía de irme a vivir a un pueblo… creo que la vida de pueblo es fantástica para los niños (y más niños como los míos, amantes de los animales y de la montaña), pero lo que siempre me echa atrás es esto, precisamente… el que en una ciudad puedan crecer sin destacar demasiado, encontrando gente y grupos con los que identificarse…

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