La lejanía del mar, las distancias inaprehensibles, la sequedad en la piel y en la nariz, la media hora de más al anochecer, las cigüeñas posándose en el campanario, la calidad del agua del grifo, el metro que siempre llega por el lado por el que no lo esperas, el calor asfixiante de agosto, la irrupción sorpresiva del otoño, el cielo azulísimo, el pan sin tomate, el cosquilleo en la nuca al oír a alguien hablar tu idioma, las tapas en los bares, la absoluta incapacidad para hacerte una imagen mental de la geografía urbana, lo rápido que se seca la ropa tendida, las tardes larguísimas de la jornada intensiva, levantarte en otoño y asarte a mediodía, la afición a trasnochar, la manera de hacer las cuentas cuando pagas a escote, el girar una esquina sin saber qué hay al otro lado, las neveras de los súpers sin butifarras ni libritos, la imposibilidad de imaginar el mar.
E ir dándote cuenta de que las que realmente cuestan no son las diferencias grandes sino las pequeñas. Y que son también las primeras que se dan por sentadas.
Comentarios en: "Esas pequeñas cosas" (14)
Yo reconozco que vivir en un sitio sin mar se me haría difícil…
Es lo que decimos todos los que nos alejamos de él, incluso aunque cuando lo tuviéramos tampoco fuéramos a menudo… es más el saber que está allí que el uso que se hace de él realmente (al menos en mi caso)…
Puedo sentir nostalgia de Esas pequeñas cosas, aunque mis estadías fueron breves. No dudo que en poco tiempo Madrid tendrá el honor de merecer palabras tan bellas como estás.
Seguro. Lo malo es que las que pierdes las notas mucho, y las que ganas, es muy fácil darlas por sentada. Supongo que las echaré de menos cuando vuelva… esto que Benedetti llamaba «desexilio».
La piel, la piel… lo que cuesta adaptarla a un entorno seco! Yo no lo conseguí hasta que dejé de fumar y (bien colateral) la piel se transformó. Tendrás que buscar tu propia artimaña 😉
Por si no lo había escrito antes: me encantan tus listas!!
Yo de momento intento disciplinarme con la crema hidratante… no me va mal…
Como yo ya SOY de entornos secos y sin mar… me quedo con el agua del grifo, el cielo azulísimo y las cigüeñas del campanario. Es importante verbalizar lo que echamos de menos. Una forma cariñosa de hacer esas cosas cada día más nuestras. Y me encantan también tus listas. Bienvenidos a esta jungla
Gracias. Algo que no puse: la simpatía, la capacidad de acogida de su gente. Que lo hace todo muy fácil.
Aunque te sientas bien en tu nuevo hogar, siempre echarás de menos lo «tuyo» 🙂
Puedo preguntar que significa pagar a escote?
Pagar a medias… algo que en mi ciudad natal es difícil hacer sin medir quién ha comido más y quién ha comido menos 😉
Pagar aprtes iguales. Se divide entre el nº de comensales..sin indagar quien comió más, quien bebió vino, quien comió postre…..
En mi tierra se hace así.
En la mía no es poco habitual que los que han comido menos lo reclamen…
Esas pequeñas cosas… sí, tannnnnnn importantes. También me encantan tus listas. Bienvenidos
Pues sí… aunque parezca mentira, más importantes a veces que los grandes cambios.